jueves, 6 de octubre de 2011

Capitulo IV

Una de las noches que Santa se encontraba en pleno periodo triunfal cenaba con su destacamento de gentiles hombres en el Trivolí Central cuando vio entrar a sus hermanos Esteban y Fabián vestidos de negro, se levantó de la mesa y fue a un rincón para hablar con ellos, sus hermanos fríamente le dijeron que su madre había muerto y que su última petición había sido que le avisaran que no la despreciaba, que la había perdonado, Santa tomó las manos de sus hermanos y lloraron los tres, Esteban pronto se separo de ella y dijo que eso era todo lo que tenían que decirle, que jamás los buscara y que pensara que ellos también habían muerto, sin mas se fueron dejando a Santa aterrorizada con la noticia y salieron, Santa salió del salón y sin decir más se fue a un hotel de donde envió un mensaje a la casa de Elvira para que le enviaran el vestido negro más elegante que estaba en su guardarropa y un mantón negro.
       Cuando llegó el vestido Santa se lo puso y se fue caminando hasta la iglesia de Santa Clara donde un grupo de personas hicieron que la sacaran de allí cuando la reconocieron, ya que según ellos por su profesión ella no tenía derecho de estar en ese lugar, según las leyes católicas que allí regían, Santa les pedía que la dejaran rezar por la muerte de su madre, pero la actitud de esas personas la hicieron sentir tan indigna de todo que salió sin decir más, camino por las calles sin ningún rumbo y sin poder defenderse de lo que era su verdad.

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