Un día Dorian cuando desayunaba llegó Basili muy preocupado por el
estado de ánimo que podría tener Dorian por la muerte de Sibyl, pero Basil se
asombró de la frialdad con la que hablaba de ese hecho y le dijo que ya havia
cambiado y que no era el mismo.
Basil le dice que le preocupa la información judicial y le
preguntó si alguien sabía su nombre, pero él dijo que ella sólo lo
llamaba “Príncipe Azul“ y éste se queda tranquilo, Dorian le pide
que haga un retrato de Sibyl y Basil acepta diciendo que debía ir a posar, a lo
cual Dorian se negó rotundamente y Basil dijo entonces que llevaría su retrato
a la exposición de Paris, pero Dorian le dijo que él prometió no exponer ese
cuadro en ningún lugar y que dejaría que lo llevara con una condición, que le
contara su secreto, Basilio aceptó condicionándolo también a contestar una
pregunta ¿Has notado algún cambio en el retrato? Dorian se asustó y por su
expresión supo que ya lo había notado y se sentó a contarle su secreto
diciéndole, cuando lo conocí lo idolatré de inmediato pensando que era un
sentimiento que los demás juzgarían como pecaminoso y por eso nunca se lo dijo,
pero que eso ya no importaba que sólo quería llevar el retrato a la exposición,
la confesión a Dorian le sorprendió mucho, pero también le preocupó porque él
sentía lo mismo por Lord Henry y le dijo al pintor que le agradecía su
confianza, pero que no volvería a posar para él y nunca más nadie volvería a
ver el cuadro, que lo iba a cambiar de lugar.
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